Caralvá
Día 8 (16 días para el 10 de mayo)
Al final de La Caverna de Platón. La imperfección.
Intentamos por medio de las palabras resucitar a los inconscientes, ese es el oficio.
Confesión: Es posible el mundo convertido en verbo lo llevamos en la bolsa, con sus alas agitantes, prendido en nuestros pensamientos, nos escolta para observar otros territorios, es nuestro caleidoscopio cotidiano, nuestro aliado.
El pequeño verbo atrapado en nuestra bolsa respira con nuestras palpitaciones, tiende un nexo entre algunos lectores y la página de Internet, con una comunicación instantánea con olor a siglo XXI, con su esfuerzo para no olvidar su futuro en la vorágine urbana.
Escribir es el trabajo más liberador de la especie humana, porque nos lleva a la luz de la comunicación, fuera de la caverna…
Enviar mi pequeña novela al concurso on-line El Corte Inglés y Book and You, quizás es mi acción más ridícula desde que escribí mi primer poema, porque usualmente lo primero que uno hace solo tiene esa palabra, en este caso es otra: “mi primera vez” claro el resultado es el mismo…
Y todavía pido a una cantidad de amigos, amigas y desconocidos “votar” por mi novela, conmovedor… patético.
Se necesita mucho coraje para participar en este evento, claro también desesperación.
Pero al menos tiene cierta condición infantil y si me lo permiten: “revolucionaria”, esa palabra maravillosa; su carácter legítimo lo encontramos en la acción literaria “en-línea”, colocar a disposición de los lectores obras globales nos acerca a una sola vecindad; es revolucionaria porque cualquier autor con o sin jerarquía puede enviar su novelita, acción literaria genuina que rompe paradigmas. No obstante también es plenamente infantil, evoca cenicientas y cenicientos, perdón cenizmilas y cenizmilos, que comunican en sus vecindades el concurso y piden “un voto”, al menos sus amigos se enteran que los políticos están perdiendo un pequeño espacio exclusivo, ¡Viva, la democracia literaria!.
Ahora a disposición del lector informático, la obra.
Es tiempo de competir y desafiar, nuevas realidades aconsejan nuestros pasos.
Para los que nunca pidieron publicar su obra, nuestra admiración; para los que no creen en los medios en línea, quizás comprensión, para los que estas acciones les provocan risa, bueno ya saben: “el que ríe al último….”
Por cierto, uno tiene vergüenza de pedir un voto electrónico, es una exposición ingenua que sorprende a todos, pero en este mundo todos pedimos, incluso la General Motors, no sigo porque hasta para el último descanso, nuestros amigos y amigas pedirán un poema para nuestros huesos..
Saludos amigos y amigas..
Vote por la primavera salvadoreña… nos llevan una leve ventaja, ellos 3000, nosotros 60… ánimo… hace una semana solo éramos 2!!. Encontremos a nombre de la poesía 10 votos más, cada uno.