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recuerda españa

  • Escritores de El Salvador: César Ramírez, Carmen González, Abigail Suncin

    Escritores de El Salvador: César Ramírez, Carmen González, Agail Suncin

     

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  • La voz del Nuevo Testamento en plena guerra

     

     

     

     

     

     

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    Caralvá

     

     “Soy: Oscar Arnulfo Romero,  comprendo  que el Concilio Vaticano II y la Conferencia Episcopal de Medellín tienen como objetivo, la identificación de los pobres en su propia miseria, volver los ojos a ellos en esta tierra castigada por la herencia de olvido, no es pecado, los pobres tampoco pueden ser abandonados y olvidados, que estén ahí simplemente como vegetales, no es humano, no se les puede olvidar y mucho menos ignorar, hacerlos visibles, realizar esa tarea, no puede significar más que un acto ecuménico con los mandamientos de Dios.

    Permanecer junto a los pobres, es abrir los ojos, percibir al mundo tal cual lo hemos heredado, donde necesitamos  utopías.

    El Nuevo Testamento no habla de armas, ni el buen Jesús, por ello debíamos aceptar que la Iglesia será fiel a condenar la violencia.

    En estas tierras, los cambios por mínimos que sean provocan terror en las clases poderosas, se acusa a  nuestras congregaciones de ser subversivas, en este país toda educación provoca terror, incluso la más democrática educación como la de Abraham Lincoln, los propios derechos ciudadanos de los estadounidenses asustan en los cantones de Cuscatlán. La educación siempre es el mayor símbolo de satanismo ante los ojos de los que no quieren cambios, a nuestro amigo Rutilio Grande García se le encarna toda la maldad social, como si años de segregación étnica fuesen contabilizados en un solo sacerdote, o años de injusticia se endilgaran a seres absolutamente buenos.

    Acá la palabra de paz y amor, significa guerra y muerte, paz en su mejor sentido es considerada bandera comunista, amor bajo el signo del odio significa predicar ideales extremistas... es difícil hablar de Nuevo Testamento a las armas.

    Se nos acusa de antólogos del mal, a todo aquél que hace de la Biblia su mensaje de realidad social, tal cual fue el ejemplo del buen Jesús. Hay un fallo en la llamada Teología de la Liberación, esta es que su meta no lleva hacia el Nuevo Testamento, sino hacia el Antiguo, de ahí que su vocación final sea igual que la violencia originaria del mal. De ahí las graves diferencias que los poderosos no asumen.

    Son tiempos de conflicto social, almas miserables llenas de odio, la pobreza espiritual no tiene respuestas a las demandas materiales, excepto el odio.

    La violencia debe detenerse con la paz, con la conciliación, pero nadie escucha.

    Debemos prestar nuestro corazón a todo aquél que desee vivir bajo el régimen del Nuevo Testamento, amar al prójimo, desear la paz.

    He recorrido este pequeño país llamado El Salvador y sobre cada uno de mis pasos, el Evangelio surge entre los caminos y veredas, si existe un sector que ama la Patria, se llama Sociedad Jesuita, ellos son a pesar de todo, los seres buenos de la Patria, tienen la razón en sus estudios y  en sus lecturas e interpretaciones, son seres pacíficos.

    De los militares debo confesar que son los seres que más amo en este mundo, son mis hermanos, son nuestros hermanos, ellos son los herederos de nuestras oraciones, son la prueba de nuestra devoción, no debemos condenarles nunca, ellos son después de todo, nuestros depositarios de la fe.”

    (Fragmento de la novela: La primavera salvadoreña, recuerda España)

    www.cesarramirezcaralva.com

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

  • Novela: La primavera salvadoreña, recuerda España presentación

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    Resumen (fotos de evento en este link)

    La primavera salvadoreña, recuerda España

    César A. Ramírez A.

    Agradezco al Dr. Ramón Rivas Director del Museo de Antropología Universidad Tecnológica
    A la Licda. Silvia Elena Regalado Directora Cultural Universidad Tecnológica
    A las autoridades de la Universidad Tecnológica
    Y a ustedes amigos y amigas asistentes a este evento especial.

    La primavera salvadoreña, recuerda España es un libro de: fragmentos, resistencia, memoria y contracultura contra el ruido de la maquinaria transglobal.

    Un libro de fragmentos, porque la vida es un conjunto de vivencias unidas en diversos tiempos y espacios, cada evento contiene signos de emotividad, destellos juveniles, paciencia adulta y comprensión de vejez.
    La obra es fragmentaria, porque la vida son segundos, usualmente creemos que es continuidad, pero vean como las tragedias irrumpen en nuestra sociedad en pocos segundos y en esos momentos todos perdemos, pero en ocasiones también ganamos… entonces celebramos con los límites que aún conservamos… nuestros amigos y amigas, la familia, los círculos de amistad.
    Este libro es de resistencia, lo podrán leer con mucha paciencia y cierta comprensión por los defectos que puedan encontrar, pero esta obra al menos se opone al embrutecimiento de diversos elementos que impiden la famosa introspección, esa capacidad de vernos y observarnos; porque un libro es el antídoto contra el ruido que a diario nos impide escuchar nuestra voz interior, el sonido de nuestra voz más espiritual.
    De esta manera cada lector encontrará un mundo similar al propio, si esto se logra, entonces el libro se convierte en un amigo o amiga que le acompañara toda la vida.
    Este libro es de resistencia, porque no desea olvidar, algunas pequeñas líneas marginales por ejemplo, puede ser una letra I, otra una S, pero a falta de conocer un nombre, esa pequeña letra recuerda una vida..
    Este libro también es contra-cultural del ruido transglobal, porque el libro les demandará cierto aislamiento para escuchar su voz, a lo mejor para escuchar la voz de otros personajes, pero encierra un proceso que tiende a olvidarse, porque la masificación es lo opuesto a la creación del yo interior, por esta razón en ocasiones la sociedad post-moderna enajena los procesos educativos, que en otro momento eran estelares como la lectura de los clásicos o la historia.  

    En el recorrido que Carlos Monsiváis al referir Las alusiones perdidas de José Emilio Pacheco.
    Debemos mencionar a Monseñor Romero, su ejemplo, su extraordinario aporte a la paz de la nación.
    Mencionar a España tiene un significado especial. No solo por su nexo histórico, sino por aquellos personajes anónimos que también contribuyeron en esos largos años de guerra civil, así como también los padres jesuitas, Christian Poveda, Begoña García y otros.
    De ahí que su ejemplo será parte de nuestra historia y su obra recordada por las futuras generaciones. Si logro esto en ustedes, algunas palabras les acompañarán toda la vida, que es la máxima aspiración de un escritor, entonces..
    Habré logrado mi objetivo.. Gracias

  • La primavera salvadoreña, recuerda España 23

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    Día 22 (3 días antes del 10 de mayo)

     

    Hace tiempo que cambiamos de espíritu.

    Nos atrapa la materia.

    Nos invade el sistema comercial bajo todas sus formas.

    Incluidos en el vértigo dinerario, respiramos esperanzas en los momentos de silencio.

    Entonces atrapo unos pequeños recuerdos de este mes de abril y la inicial luna del 8 de mayo.

    Es viernes muy cansado, al pensar trabajar más allá de 8 horas.

    Que magnífica pelea cotidiana, hablar solo versus gritar a las multitudes, entre ambas prefiero la estridencia, a fin de cuentas me escucharán con mínimo volumen, ellos acostumbrados a sus audífonos solo escuchan sus melodías hipnóticas.

    Es el día 22 de esta aventura insospechada de pedir votos, ridículos votos por una novela, durante el siglo XX se suponía que solo los jueces literarios agrupados en un Petit Comité decidían el destino de una obra, ahora en el siglo XXI es la multitud quien decide.

    Pero en el fondo tiene mucho de humor.

    Votos por una novela, lo bueno es el arte de pedir un acto de voluntad, lo malo es la subasta de la obra.  Los extremos de estas condiciones provocan escenarios fantásticos, incluso epifanías.

    Es hora de despedirse o el inicio de otra fase comunicacional.

    Tengo la leve impresión que esta acción sin precedente, no tiene la intensión de morir en este intento.

    En aquél lejano siglo XX habría que esperar muchos años y proponer una obra, viajar a Europa, llenarse de amigos y amigas para lograr un mérito publicable; en el siglo XXI, no tenemos que proponer una obra sino colocarla en línea, llamar a los amigos y amigas por todos los medios de Internet y aún sin mérito literario, sino comercial: ¡publicar!;  el dilema es clásico: la obra exquisita versus el éxito comercial…a lo mejor es democracia, sin demagogia… claro.

    Como los antiguos romanos reclamo mi espada de madera: rudis como los legendarios gladiadores al otorgarles la libertad. Si, ahora creo que este pequeño sentido de libertad apenas se inicia.. ¿Cuándo puedo concursar en otro certamen de novelas on-line?

    Este evento se ha convertido en un espectáculo de sangre, no dudo que muchos han pedido la muerte para muchas novelas on-line, especialmente las rivales líderes, pero nosotros hemos aprendido a vivir en este foro a pesar de todo.

    Si… pasaremos a mejor vida literaria.

    Pero siempre existen resurrecciones, especialmente en primavera.

     

    La primavera..

     

  • La primavera salvadoreña, recuerda España 17

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    Caralvá

     

    Día 16  (8 días antes del 10 de mayo)

     

    Notas marginadas…

     

    Durante 1979 acontece un Golpe de Estado, acompañar  los movimientos era una rutina solidaria.

    Vivimos en la nación de sorprendentes cambios, si eso acontecía en las grandes esferas políticas, entre las multitudes cada uno tomaba su propio camino, era curioso,  con nuestros 20 años pensábamos como viejos de 60, era natural ¿para qué esperar tanto? Tanta naturalidad aterraba a nuestros padres..

    Durante aquellos años decidimos como unidad médica y ayudar en las manifestaciones sociales era involucrarse, nuestra voluntad era simple, asistencia médica.

    Era la acción más cristiana del mundo.

    Así compartimos los graves momentos posteriores a la toma del Ministerio de Economía y luego el Ministerio de Agricultura.

    No permanecimos dentro, pero aquello en realidad era una acción que atentaba contra la libertad de los empleados estatales.

    Afortunadamente no aconteció ninguno incidente grave.

    Sucedieron bailes y fiestas dentro del ministerio. 

    En realidad acontecieron actividades que pretendieron disimular la tensión interna, pero esas acciones fueron dirigidas contra la Primera Junta de Gobierno que integró lo mejor de la intelectualidad salvadoreña, luchar contra esa junta fue el peor error de la izquierda, el movimiento era ciego.

    En ningún otro momento esta posibilidad se repitió.

    Durante esos meses de octubre a diciembre, se vivió una relativa tranquilidad, no obstante la izquierda no lograba consolidarse, pero la derecha con el ejército y el sector más beligerante logró derrotar a  las fuerzas moderadas y en poco tiempo todo cambió.

    Un Golpe interno había culminado,  el sector represivo del ejército se consolidó y eliminó a las fuerzas  democráticas, dentro de las fuerzas populares apenas habían cambiado un par de apariencias.

    Era obligación integrar una organización revolucionaria, quizás era el único pasaporte a la vida.

    La renuncia de la Primera Junta General y el exilio de otros, se debió al asesinato de los  dirigentes de FDR, aquello era terror, con tantas muertes y nosotros pensando que la revolución pasaba por nuestros zapatos, poco a poco la muerte esta a tu lado más cerca y más.

    Emilio palpa el dolor de la represión…

     

    Vota por la primavera salvadoreña

  • La primavera salvadoreña, recuerda España (15)

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    Caralvá

     

    Día 14 (10 días antes del 10 de mayo).

     

    El siglo XXI anuncia en sus carteleras enfermedades incurables.

    Unas de ellas son las ciudades que no duermen, otras las entidades que no descansan como los bancos: 24 horas, 365 días; existen otras que nos vigilan perpetuamente, sin miseria.

    Sabía que esto no terminaría bien.

    Un día despertaríamos plagados de males insospechados, la falta de sueño, la usura al infinito y tanta vigilancia nos llevarían directo al colapso, seguro a un resfrío planetario.

    La historia ya no interesa a nadie, lo sabemos pero es un placer masticarla con sorbos de café.

    Frases viejas de discusiones amargas,  frases enfermas de siglos olvidados. Pero esta dolencia incurable destila argumentos artillados.

    La guerra fría también produjo enfermedades con el mismo apellido.

    Enfermos del resfrío despertamos en América Latina poco a poco, aspirando horizontes insospechados, pero todavía con calenturas del siglo pasado. De enfermos es calificar ahora a las personas en términos fríos, cuando sus creadores abandonaron esos términos hace muchos años.

    Por alguna razón más liberadora que esclavizante, es un deleite borrar  “antiguas”  anotaciones, citas que en un tiempo las consideraba banderas inocultables, tiempo después…

     

    Jorge Luis Borges: “Quienes dicen que el arte no debe propagar doctrinas suelen referirse a doctrinas contrarias a las suyas”.

     

    Años después: “Quienes dicen que el arte no debe propagar doctrinas suelen referirse a doctrinas contrarias a las suyas”.

     

    Octavio Paz: “La búsqueda de un futuro termina siempre con la reconquista de un pasado. Ese pasado no es menos nuevo que el futuro: es un pasado reinventado”.

     

    Pero con el dulce acontecer de las temperaturas y el olvido de los males respiratorios, un día hice lo propio: “La búsqueda de un futuro termina siempre con la reconquista de un pasado. Ese pasado no es menos nuevo que el futuro: es un pasado reinventado”

     

    Que condición tan extrema.

     

    Mis banderas ya no eran más.

     

    Resfriado en realidad, invocaba mi destino naturalmente tropical, mi propio signo y toda la comprensión por mis banderas rotas, mi camino contenía la respiración al identificarme en la jungla.

     

    Feliz muerte feliz.

     

    Me libero de mi caverna… caverna liberada.