César Ramírez
@caralvasalvador
Las campanas al vuelo por el éxito de una gestión que tiene un final feliz: Fomilenio II.
El éxito del Fomilenio I permitió a la nación competir y ganar el financiamiento de una segunda etapa con fondos no reembolsables, estas nuevas donaciones se invertirán en la zona costera del país. El primer Fomilenio permitió invertir en el desarrollo de la zona Norte, con objetivos como: construcción de carreteras, microempresas, avances en el desarrollo humano y una visión integradora territorial; mientras esta segunda etapa se impulsará: el clina de inversiones, capital humano (mejoramiento de la calidad en educación) e infraestructura Logística.
Un comunicado de prensa (18SEP014 ) de la Embajada de los Estados Unidos, afirmó que se mantendrá la relación con el país a través del convenio de la MCC y el Asocio para el Crecimiento, señalando la continuidad de los proyectos, concluyendo en la firma del segundo convenio con El Salvador. La fecha programada es el 30SEP014 en ese evento se desembolsarán los primeros diez millones para la construcción de infraestructura y montar la oficina, según declaraciones de la Embajadora de esa nación: Mari Carmen Aponte. El nuevo convenio es una inversión de EEUU por $277 millones, con una contrapartida del GOES por $88.2 millones para reducir la pobreza y generar crecimiento económico.
Se debe destacar que los obstáculos para llevar a buen puerto el Fomilenio II han sido titánicos, una gestión incluso contra las fuerzas conservadoras que impulsaron conspiraciones en el Congreso Norteamericano con el objetivo de impedir la realización de este magnífico proyecto, sin embargo esas fuerzas fueron derrotadas porque sus tesis no tenían ninguna validez en los nuevos tiempos democráticos, además estas significativas iniciativas coinciden con las relaciones internacionales: una reforma a la ley contra el lavado de dinero y la aplicación de los reglamentos del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Centroamérica, agregando la garantía institucional de los mecanismos de transparencia en el uso correcto de los fondos y que los proyectos a impulsar se harán siguiendo las licitaciones públicas en las instancias correspondientes. Este proyecto de largo plazo, es un cambio cultural para miles de salvadoreños, se crearán fuentes de trabajo en la nación, se promoverá el desarrollo en los núcleos de las comunidades, además los trabajadores no solo contarán con una herramienta para su familia sino que probablemente se heredará la infraestructura a las siguientes generaciones.
Hace unos meses la izquierda ganó la segunda administración gubernamental por elecciones libres y democráticas, es un acontecimiento sin precedentes en nuestra historia, así como este avance consolida la nueva era de respeto constitucional, el proyecto Fomilenio II permitirá el desarrollo humano y demuestra que el carácter ideológico que divide a los pueblos es cosa del pasado. En los nuevos tiempos de la democracia, toda ayuda se agradece, nuestro pueblo ha demostrado en su historia que puede vencer a las dificultades con imaginación y voluntad. Gracias al pueblo y Gobierno norteamericano.
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