Adiós a la ideología…hablemos de negocios primero

Caralvá

El concepto de historia es amplio, podría afirmar que cada corriente política se define por su lectura selectiva de la historia, con diversos significados para otros, cada quien tiene su historia personal, en algunos casos implica a las multitudes.
El 5 de noviembre de 1994, publiqué en este periódico mis reflexiones sociales con el título: “Que nos paguen en dólares”, esta condición de publicación connota un acontecimiento cumplido el 01 de enero del año 2001, en la Ley de Integración Monetaria, aprobada por la Asamblea Legislativa el 30 de noviembre de 2000, (Pub. Diario Oficial No.242. 22 DIC 2000), anoto la fecha (05NOV1994) por si alguna persona desea leerlo en los archivos de cualquier hemeroteca.
En este momento ajustamos cuentas con la historia, con un saldo a favor por supuesto, implica una pequeña demanda ejecutada 7 años después, este oficio de profeta tiene un sabor amargo, por las diversas aristas que contiene comprender lo inevitable, porque el acontecimiento anunciado llegará en su debido momento, lo único que podemos ganar es tiempo, un tiempo vital para cumplir las esperanzas de todos.
Anoto también la amplia sonrisa cómplice de muchos colegas, amigos y amigas que al enterarse del acontecimiento, recordaban aquellas reflexiones. Exigir a la democracia su límite es un deber ciudadano, al margen del carácter ideológico.
Existen algunos elementos que nos ayudan a comprender mejor nuestra nación, uno de ellos es la demanda ciudadana de eliminar el carácter ideológico de la agenda política nacional.
Citaré dos declaraciones que me parecen sobresalientes:
Joseph Davies embajador de EEUU en Moscú: “Cuando examinemos la situación de nuestras relaciones mutuas, debemos empezar por dejar de lado las diferencias ideológicas y sociales de nuestros dos sistemas políticos”… 1938.
Cuanto tiempo les habría ahorrado esta declaración.
Y otra: El presidente Luis Lula da Silva, afirmó el 23 de noviembre 2005 (AG.EFE) "El ALCA se convirtió en un debate ideológico y se dice que el que está en contra es de izquierda y el que está a favor es de derecha. Es un debate loco", lamentó el presidente durante un discurso en Río de Janeiro. Por ello el presidente de Brasil, afirmó que las discusiones del Acuerdo de Libre Comercio (ALCA) con Estados Unidos deben ser sacadas del terreno ideológico y ratificó su interés por negociar los capítulos sensibles en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Cuantos límites ficticios podría eliminar esta declaración.
67 años es el tiempo entre estas dos declaraciones y la demanda es la misma, el fin de las posiciones irreconciliables de izquierda y derecha.
Es el momento de ajustar cuentas con la historia, la ideología como elemento de cambio social ya no tiene vigencia, dividir nuestra sociedad de esa manera, es pensar que la democracia pasa de ser gobierno del pueblo a gobierno de los políticos, donde nuestra representación ciudadana se pierde, como agua entre las manos.
El ajuste de cuentas con la historia pasa por abolir los términos extremos, ya lo dijo el presidente de Brasil, Luis Lula da Silva, continuar con estos criterios: “es un debate loco”.
El resultado de eliminar esa falsa frontera, es una realidad nacional plena de demandas civiles y amplias posibilidades de trabajar juntos, porque cuando la palabra no es escuchada, simplemente perdemos el tiempo, mientras los pobres pierden la vida llenos de esperanzas que no llegarán nunca.