Ok

By continuing your visit to this site, you accept the use of cookies. These ensure the smooth running of our services. Learn more.

piratería:discusión política

  • Involución política

    medium_01-12-07_0721.jpg



    Caralvá

    Los sucesos del sábado 12 de mayo 2007 en el centro de San Salvador, no deben ser tomados a la ligera, a nadie escapa que esas expresiones de violencia, saqueos, bandolerismo etc., no conducirán al fortalecimiento institucional.
    El estado democrático no es una fórmula matemática que sumará o restará mecánicamente, existen factores que pueden propiciar la involución política de la realidad nacional, este esquema es conocido porque aplicará violencia, disminuirá el legado de los derechos humanos y muchas expresiones políticas; el resultado será un panorama muy difícil para todos, principalmente para los sectores económicos y la clase política… con la inestabilidad nadie gana.
    Legalidad e ilegalidad se conjugan en el centro de la ciudad, el factor humano se conjuga con vicios y herencias negativas, parece lejano y un tanto ficcioso, pero es mejor un acuerdo político entre partidos que una proyección unilateral de solución al problema de los vendedores informales. Ahora algunos comerciantes informales se apresuran a pronunciarse, muy bien porque delimitan su campo de “regularidad”.
    Los partidos políticos deben fijar fronteras claras con esta situación…propiciar la “ilegalidad” es alentar al crimen organizado.
    Un acuerdo político entre partidos, al menos propiciará una segunda fase de encuentro de factibilidad para estos cientos de personas aglutinadas en las calles del centro histórico. En la mente de los gobernantes el carácter de la alianza con diversas fuerzas debería ser prioritario, puesto que los problemas de la ciudad de San Salvador no son ajenos al resto de la nación.
    Los acontecimientos del sábado 12 de mayo, son un claro signo de alerta para cualquier estructura de poder, incluyendo la Iglesia, los poderosos sectores financieros, fuerza armada etc., porque estas acciones pueden repetirse en cualquier lugar o sitio donde se efectúen transacciones ilegales. La ilegalidad generará campos de ingobernabilidad y de carácter delictivo. Un acuerdo entre partidos eliminará la “sospecha” que las acciones tienen un carácter oculto: “llevar votos al partido”, con mutuas acusaciones. Los agrupamientos sociales alrededor de las fuerzas políticas se definirían, en consecuencia esas fuerzas irregulares no tendrían referente político. Estos tiempos reclaman un acuerdo inter-partidario para avanzar hacia un acuerdo nacional en el tema.
    Las opciones de solución democráticas son pocas, el objetivo de la paz social, en estos momentos debe dar inicio desde los partidos políticos que son los instrumentos constitucionales, beneficiando al final a la nación y generando una dinámica para los futuros proyectos sociales.
    Los que consideran que la crisis beneficia a un partido político, se equivocan, porque ganará el caos, la corrupción, el saqueo o la ilegalidad. Se debe actuar, porque la pasividad se ve con recelo y con mucha aprehensión por la opinión pública, lo que está en juego no es un cambio de gobierno, sino una opción de bienestar y estabilidad social que se deteriora desde el Centro Histórico de San Salvador.
    Siempre es sano recordar que podemos involucionar políticamente, en ese caso nadie será el vencedor en medio del caos.
    http://www.diariocolatino.com/opiniones/detalles.asp?NewsID=3562