Ok

By continuing your visit to this site, you accept the use of cookies. These ensure the smooth running of our services. Learn more.

zoonpolitikom I - Page 55

  • Bicentenario de la Constitución española de 1812

    P1120121.JPG

     

     

     

     

    Caralvá

     

    La Constitución española aportó para la posteridad de nuestras naciones significativos conceptos que deben tomarse como importantes legados del desarrollo histórico regional;  en el siglo XIX la provincia de San Salvador aún era parte del Reino de Guatemala, bajo una administración colonial.  El decadente imperio español mostró signos de renovación política ante la invasión francesa, su contradicción interna entre la monarquía, el clero,  el ejército y la población civil española fue su más notorio signo conflictivo. El complejo mapa político de aquella época se materializa desde las Renuncias de Bayona en 1808 y se manifiesta en toda su extensión bajo la Constitución del 19 de marzo de 1812.  Los historiadores españoles al menos coinciden en los siguientes puntos de reformas de aquella constitución: División de poderes (Miguel Artola), Ciudadanía ( Antonio Álvarez), Enseñanza Pública (Emilio de la Parra), Libertad de Expresión e Imprenta, Abolición de la tortura, Diputaciones provinciales, Libertad de trabajo e industria, Loterías del Estado, Fiscalidad para todos, Tertulia política –cafés, círculos de discusiones ciudadanas- (Marieta Campos)..

     

    Si bien aquella condición en 1812 era una verdadera lucha civil en España, en Guatemala se jura la Constitución de Cádiz hasta el día 12 de septiembre de 1812. Dicha constitución establecía la creación de las diputaciones provinciales así: José Matías Delgado es  elegido diputado, ante lo cual debió abandonar su curato y trasladarse a la capital y se instaló el 3 de septiembre de 1813. El presbítero José Simeón Cañas en la sesión inaugural expresó su criterio que la representación de los pueblos en la diputación solo estaba sujeta a las Cortes y no al Jefe Político José Bustamante y Guerra (Capitán General). Bustamante consideró aquello una afrenta a su poder.  La diputación elevó y acusó públicamente en las Cortes de Cádiz al propio Bustamante: “por haber dilatado con un pretexto frívolo la instalación de la Diputación expresada”… por su omisión en todo lo concerniente a las elecciones de diputados porque no le acomoda que vengan a la península testigos de su conducta y por no haber permitido cantar un Te Deum, después de concluida las elecciones, ni que se imprimiesen éstas… no se conoce la libertad de imprenta, por tener Bustamante “previstos a todos los impresores para que nada impriman sin su licencia”;  en la Cortes los diputados Arispe y Doctor Antonio Larrazábal levantaron su voz contra estos abusos.  El resultado de aquella situación fue el maltrato contra Larrazábal. Es de notar la diferencia de aplicación y comprensión de tan importante documento, si bien en España transcurre una revolución liberal, en América parece que la Constitución de 1812 cambia según las autoridades coloniales, no obstante el sufragio se constituye en un precedente histórico. Aunque algunos historiadores afirman que “El principal error de esta Constitución es su tratamiento a las colonias americanas. El no reconocerles derechos de autonomía ni cederles parcelas de soberanía  probablemente disuadió a los liberales hispanoamericanos de intentar llevar a cabo las reformas deseadas  sin romper con la metrópoli”. No obstante el 4 de mayo de 1814 el Rey Fernando derogó la Constitución de 1812 y disolvió las Cortes. Pero aquella constitución influyó decisivamente en el segundo movimiento ciudadano hacia la independencia del 1814 en la provincia de San Salvador. 200 años después el evento electoral (El Salvador 2012) también llama a Reformas Constitucionales.  www.cesaramirezcaralva.com

     

  • Elecciones 2012: novedades conocidas hace 40 años

    15MAR012 DSC00384.jpg

     

     

     

     

     

     

     

     

    Caralvá

     

    La percepción que tenemos después de las elecciones es que el partido de la oligarquía ha triunfado sobre el partido de los proletarios, o el partido anticomunista triunfó sobre el partido de los marxistas-leninistas, condición miserable para una legítima democracia, ello provoca una falsa alegría o tristeza,  puesto que las elecciones se transformaron en batallas con el saldo de militantes fallecidos, atentados terroristas (uso de granadas, esparcir químicos en la sede del partido rival con muchos intoxicados), desinformación, campañas negras, grises, rojas etc. ¿ésta es la democracia que queremos?; de nuevo escuchamos los cantos a voz de cuello que pidieron la muerte del adversario y la respuesta no fue menos contundente. Al finalizar el proceso electoral, la realidad muestra signos decadentes en los aspectos del ejercicio del voto, existen denuncias de fraudes, delitos electorales, llamados a no votar, coacción de electores en poblaciones, agresiones contra las residencias de los opositores, suplantación de miembros en juntas receptoras de votos, turbas que causan daños en centros de votación, además del abstencionismo que en el fondo beneficia el caos institucional y deteriora la credibilidad en el sistema democrático. 

     

    Hemos sostenido que la diferencia entre partido de gobierno y poder ejecutivo es un logro histórico, condición que es un cambio educativo trascendental, los errores cometidos por un partido se reflejan en sus contenidos programáticos o las propuestas de leyes, declaraciones, dirección interna etc, mientras en el gobierno los desaciertos se reflejan en algunas políticas administrativas que han causado daño en diversos sectores sociales, muchos sectores de clase media han perdido el inicial entusiasmo por una mejoría en el horizonte democrático, estos desaciertos no permiten la movilidad social. Pero también han existido notables éxitos, de tal forma que si buscamos culpables los encontraremos, si buscamos soluciones estas pasan por modernizar las formas de participación ciudadana.

     

    Tenemos la percepción que un voto es igual a la democracia, condición muy pobre para las aspiraciones de muchos ciudadanos que después del 11 de marzo no tendrán ni voz, ni voto en las grandes decisiones hasta el año 2015, un poco triste puesto que hasta ahí llegó nuestro sentido de decisión política, a partir de ahora los ciudadanos que votaron por un diputado no tienen ningún mecanismos para influir en los depositarios de ésta representación, no recibirán información sobre su actuación, ni sus decisiones, menos si se convierte en tránsfugo a mitad de período. Nuestro momento político no debería terminar solo en el voto, pero al menos la institucionalidad funciona, la democracia se fortalece, ahora cada quién a ganarse la vida como pueda, a la realidad capitalista y el trabajo honrado.  Desolador el panorama para los siguientes años y esto no cambiará nada a mediano plazo, excepto si surge el liderazgo para formar consensos nacionales desde el poder ejecutivo, junto a los partidos políticos hacia los objetivos que nos unen bajo una sola nación.

     

    www.cesarramirezcaralva.com

     

  • Después de las elecciones de 2012. El Salvador

    DSC00043.jpg

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    Caralvá

     

    La campaña electoral ha llegado a su fin, los electores ya tenemos una decisión firme sobre el partido a quién otorgaremos nuestro voto. Esta campaña se ha caracterizado por un enfrentamiento visceral del pasado con el presente, un esquema de realidades versus las promesas, mentira y verdad en desenfrenada contienda repitiendo cada quién a su modo una comparsa de sordos, es muy desafortunado este acontecimiento puesto que algunos partidos minimizan la inteligencia popular y la memoria no es un recurso vital para la clase política.

     

    Hemos observado con preocupación durante este tiempo de campaña, que todo acto social fue enmarcado desde la óptica partidaria, acción que ha desenmascarado a entidades que en otro momento se denominaron “apolíticas”;  pero todo es sospechoso en tiempos de elecciones a tal  grado que bajo esta premisa nada escapa de esas fuerzas ocultas para obtener votos subterráneos, agazapados en sus trincheras neutrales gritan tropelías, pero son muy conscientes que ese golpe desesperado apela hacia la lealtad de sus electores perdidos, esa condición de la pérdida de fidelidad de otrora sectores conservadores se debe a una serie de errores que durante muchos años excluyeron a sus propios sectores aliados, de ahí la gran diferencia visible entre partidos ortodoxos. La campaña ha demostrado que los resabios de la guerra no han terminado, ha existido violencia de todo tipo, condición preocupante veinte años después del Acuerdo de Paz, quizás porque ambos partidos son hijos de la guerra, sus historias son producto de un concepto ideológico del siglo pasado, el cual no terminará hasta que se inaugure de la misma manera otros nuevos partidos productos de la era de paz, sin diferencias ideológicas bajo un nuevo acuerdo por la democracia. Si esto es considerado imposible, es oportuno estudiar el proceso democrático en Rusia o en México, con cambios trascendentales en beneficio de sus propias sociedades.  

     

    Desde la óptica ciudadana la seguridad es un tema apremiante, así como el desempleo, la pérdida del poder adquisitivo, la migración, la salud, las pensiones etc., realidades que golpean a los asalariados bajo el gobierno de cualquier bandera política y desafortunadamente está limitado por leyes en su mayoría desfasadas, sin modernización.  Los ciudadanos estamos obligados a delegar nuestras decisiones políticas a la clase política, no hay otra alternativa, de ahí la responsabilidad de continuar la renovación o retornar al pasado. Podría parecer indiferente qué partido gobierne, si no cambia la condición económica, ni la exposición a delincuencia, ni se detengan los asesinatos de los trabajadores del transporte, pero estas circunstancias si nos afectan, por ello no podemos dejar de asistir al evento electoral, puesto que debemos cambiar esta herencia negativa y solucionarla, desde mi punto de vista acelerar los cambios es urgente, continuar con la renovación de la democracia es impostergable y avanzar hacia una nueva sociedad incluyente es la meta necesaria.

     

    Necesitamos una clase política que visualice elementos fundamentales para la nación: Democracia y Desarrollo Social, de tal forma que las soluciones se conviertan en realidades y no solo  promesas, necesitamos un parlamento fuerte con una mayoría que impulse la modernización del Estado y las reformas constitucionales, así las iniciativas legislativas podrán coincidir con una presidencia líder del cambio, acompañado por el poder municipal junto a sus ciudadanos. Es un momento crucial, continuar el cambio es necesario. El balance político es positivo y pronto será mejor.

    www.cesarramirezcaralva.com

     

  • Voto diferencial y voto unitario

    DSC00052.jpg

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    Caralvá

     

     

     

    Las elecciones son una consulta necesaria para renovar a las autoridades de los gobiernos locales y a los legisladores, no es lo mismo votar por una alcaldía que votar por una fuerza que decide las leyes de la nación, puesto que acá según la tradición es lo mismo, lo cual lleva a lecturas políticas de riesgo para los próximos años e incluso incidir sobre el futuro de reformas profundas constitucionales;  para algunos partidos políticos es lo mismo, para otros no, la diferencia reside en que la representación en la Asamblea Legislativa abre un abanico de posibilidades distintas que los gobiernos locales, entre ellas la política de alianzas, las comisiones legislativas o la Junta Directiva etc.  la representación de diputados de las dos principales fuerzas no tendrán mayor cambio pero si habrán sorpresas con las otras fuerzas, según las encuestas.

     

    La gran diferencia en esta situación puede ser  el voto unitario el cual selecciona un solo partido para ambos niveles: alcaldes y diputados, pero puede existir también  un voto diferencial, que otorgue un voto por un partido y la segunda opción por otro, de tal forma que la lectura no indicará una selección precisa sino que distorsione los resultados. El voto diferencial no significa que la decisión de los ciudadanos renuncien a su partido, sino que pueden elegir otro partido porque consideran que las opciones actuales no cumplen con sus aspiraciones ciudadanas, en otras naciones es usual, acá parece que todas las encuestas solo enfocan en un solo sentido el voto, como si no existiese opción de votar por diferentes partidos en las condiciones señaladas.

     

    El voto diferencial es el de aquél ciudadano que dice: “yo soy de un partido”, pero aclara, “en este caso votaré por otro”, “según me convenga”… esta condición aplica para todos los partidos.

     

    Parece una sutileza y un ocio improductivo hablar de esta condición de voto, no obstante debemos preguntarnos si acaso durante estos años algunos partidos mostraron serios errores y los corrigieron, mientras otros continúan en el error, han existido fallos en todos los partidos que fueron rechazados por sus propios simpatizantes, el fondo de estas faltas son la ausencia de comunicación permanente con los electores, debido a que pasado el evento electoral la ciudadanía descansa en paz, hasta el siguiente ciclo.

     

    Existe un tercer factor que influye en estas decisiones, es el factor de la imagen de la forma de gobierno, la cual distorsiona positiva o negativamente el espectro electoral a pesar que no sean elecciones presidenciales, en el fondo es la pobreza de comunicación de algunos políticos, que no orientan a la opinión pública en los momentos de crisis, sino que sin racionalidad se dedican a desprestigiar a sus adversarios de tal forma que publicitan a su partido, pero se olvidan de los acuerdos posibles para la nación.

     

    Estas condiciones nos indican el grado de pobreza que tenemos en este momento, diferir de algunas propuestas políticas de los partidos, no significa deslealtad a los principios democráticos, acá parece que esta posición es traición.

     

    El panorama ideal de gobernabilidad es un poder ejecutivo fuerte que apoyado desde la Asamblea Legislativa impulse todas las reformas necesarias, ¿acaso el Estado no necesita reformase?, ¿Acaso la Constitución Política no debe reformarse para enfrentar el flagelo de la delincuencia y el narcotráfico? ¿Y los gobiernos locales acaso no deben contar con el recurso económico para su desarrollo?

     

    A pesar de algunas diferencias, mi voto será unitario, para mi la Historia vale tanto como el futuro de la nación.

     

    www.cesarramirezcaralva.com

     

     

  • Constitución española de 1812 y El Salvador 2012

    P1130327.JPG

     

     

     

     

     

     

    Caralvá

     

    Un poco de Historia: La Constitución fue decretada por las Cortes Generales de España en Cádiz el 19 de marzo de 1812. Aquella constitución influyó decisivamente en los posteriores movimientos insurreccionales del antiguo Reino de Guatemala, especialmente en la provincia de San Salvador, la cual recién había realizado el primer grito de independencia el 5 de noviembre de 1811.

     


    Algunos artículos de aquella constitución son: Art. 1. La Nación española es la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios. Art. 5. Son españoles -y explica ampliamente aspectos inclusivos-… Art. 18. Son ciudadanos aquellos españoles que por ambas líneas traen su origen de los dominios españoles de ambos hemisferios y están avecindados en cualquier pueblo de los mismos dominios. Art. 22. A los españoles que por cualquier línea son habidos y reputados por originarios del África… y Art. 29. Esta base es la población compuesta de los naturales que por ambas líneas sean originarios de los dominios españoles, y de aquellos que hayan obtenido en las Cortes Carta de Ciudadano, como también de los comprendidos en el artículo 21. Y el Art. 3. La soberanía reside esencialmente en la Nación, y por lo mismo pertenece a ésta exclusivamente el derecho de establecer sus leyes fundamentales… Derecho a secesión auténtico, viejo recuerdo francés y legado al cambio de un mal gobierno.
    Esta breve reseña muestra un amplio panorama que une al imperio español en una comunidad internacional bajo una sola bandera, al leer cuidadosamente cada artículo sorprende el carácter incluso de la ciudadanía constitucional. Es en este marco de legalidad que se convoca a las primeras elecciones libres del continente por número de habitantes, puesto que antes de ello las autoridades se elegían por representación de los ayuntamientos. Es el Art. 3 que mencionamos bajo el cual se otorga la soberanía al pueblo, condición sin precedente en el imperio español.

     


    16 de septiembre de 1812 se recibe en San Salvador la Constitución de la Monarquía Española del 19 de marzo, la Real Cédula de 18 de marzo y 23 de mayo, que mandan la publicación de la Constitución, y el indulto concedido a todos los reos que no hubieran cometido delitos atroces y un decreto de la Corte concediendo que fueran popularmente electos los Ayuntamientos de los pueblos, aunque no tuvieran mil habitantes. La elección de los Ayuntamientos Constitucionales por la acción directa del pueblo, les dio la representación de la soberanía popular. Como la ley ponía bajo la jurisdicción de los Ayuntamientos, la vigilancia de las cárceles de Corte y ciudades, fue de gran importancia para los insurgentes, porque las cárceles estaban subordinadas a las autoridades absolutistas, las que cometían toda clase de crueldades con los reos políticos.

     


    Bajo ese signo el mapa continental conformado por cuatro virreinatos ha desaparecido, la Constitución de 1812 elimina: Nueva España, Perú, Nuevo Reino de Granada y Río de la Plata en su lugar proclama: “La nación española es la unión de todos los españoles de ambos hemisferios”… podemos imaginar esa nación constitucional.

     


    Casi por coincidencia en nuestra nación realizaremos un evento electoral en unas cuantas semanas, a lo mejor celebraremos también ese bicentenario ejerciendo el voto directo y conmemorando las primeras elecciones libres en nuestra historia.

     


    Es una coincidencia feliz de otro bicentenario bajo el signo de elecciones libres, puesto que a pesar de todo: “vamos por buen camino”.

    www.cesarramirezcaralva.com

     

     

     

  • Sin temor al futuro en 2012

    P1130019.JPG

     

     

     

    Caralvá

     

     

     

    Existe una avalancha del infortunio sobre el futuro de la nación, esta condición se perfila con intensidad durante los procesos electorales, este año no es la excepción, la condiciones objetivas de la realidad  nacional a pesar de todo permite un optimismo moderado, no obstante la voz de los ciudadanos y su opinión es sustituida por las acciones en algunos medios de comunicación, así las realidades son distorsionadas durante las campañas electorales.

     

    Los viejos profetas del infortunio en estos momentos deben estar bajo la mesa más oscura de un castillo olvidado en el tiempo, hace un par de años inundaron la nación con estribillos y cánticos que hacían pensar en un éxodo masivo de todos los miembros de las familias más adineradas, junto a los imitadores y aspirantes a oligarcas; afirmaron que en pocos meses el país sería un ruina completa, que un Golpe de Estado era posible, que las reservas internacionales serían saqueadas, con deportaciones masivas desde Estados Unidos, todo era cuestión de tiempo, además el dólar sería sustituido por el colón y un rosario de fatalidades peores que el Apocalipsis.

     

    Estos profetas cuando se empeñan en vociferar el desastre nunca proponen soluciones, olvidan la historia de 20 años de un Partido-Gobierno, olvidan que la delincuencia no es un fenómeno reciente, que el contrabando de drogas era cínico y a la vista pública, recordemos que un alijo de droga fue descubierto en unas bodegas privadas pero curiosamente no hubo capturas, en las antiguas entidades financieras nunca se denunció las irregularidades de organizaciones sospechosas que luego provocaron un daño irreparable a cientos de familias salvadoreñas, en algunos casos provocaron la muerte de jubilados que perdieron los ahorros de su vida, el nepotismo en instituciones públicas, el reparto de becas destinadas a estudiantes pobres en el exterior.. etc. pero estos profetas del desastre callan la historia; “extraña memoria” que olvida a propósito y no recuerda a los afectados.

     

    Los profetas del desastre en tiempos electorales están “enfiestados”, todo está mal y vamos para peor, si esto no cambia simplemente el caos… ¿no piensan acaso que si sus augurios se cumplen no quedará nada? ¿No saben que si sus interpretaciones se realizan no ganará su partido, sino perderemos a la nación? ¿Por qué insistir en el desastre si después de esa catástrofe que ellos desean tan patrióticamente heredarán la ruina?.

     

    Así al realizar afirmaciones irresponsables deberíamos de estudiar las circunstancias de nuestra nación, su historia, las estructuras legales, etc, todo el marco conceptual que nos permite como ciudadanos construir una nación para los siguientes años, necesitamos este ejercicio, con soluciones posibles  para construir una racionalidad multisectorial,  para encontrar  puntos convergentes que no deben ser manipulados tendenciosamente, aspectos que nos involucran hacia una democracia posible como: seguridad, economía, energía, alimentos, migración, cultura etc. elementos que parecen unirnos más que separarnos…¿Quién no desea la seguridad de su familia? ¿Quién no desea una economía estable e integral? ¿Quién no  aspira a productos energéticos a precios justos y  accesibles? ¿Es extraviado solicitar los derechos de nuestros compatriotas en tierras extranjeras y en ese punto trabajo temporal o su protección  migratoria?

     

    En lugar de lanzarnos propuestas huecas y sin contenido, divulgar calumnias de un partido contra otro, la ciudadanía desea escuchar a los partidos una opción de acuerdos posibles, de una propuesta de unión  a la nación ante el infortunio. El pueblo ya votó en ese caso y no temer al futuro es una realidad ahora.

     

    www.cesarramirezcaralva.com

     

     

     

  • Separación entre Gobierno de la República y Partido Político

    DSC00522.JPG

     

     

     

    Caralvá

     

     

     

    Durante muchas décadas desde el siglo pasado era ciencia ficción separar el Poder Ejecutivo del Partido Oficial,  de tal forma que el Partido era el gobierno, con toda la extensión de funciones, privilegios, distribución de cargos, etc. no existía diferencia alguna entre un funcionario público y su calidad de miembro de un partido político.

     

    El simple ejercicio de la memoria nos permite identificar a los gobiernos con sus colores sin distingo alguno del partido en el gobierno, era Partido-Gobierno, no era Partido Político y Gobierno, el resultado de esta unión no distinguía entre aciertos y fallos, entre corrupción de funcionario y corrupción de Partido, de tal forma que todo el peso de esos tremendo errores con nombres y apellidos era firmado por el Partido en el poder, pero también existían extensiones de ese ejercicio erróneo, en años recientes varios presidentes del antiguo partido en el gobierno no distinguía entre hacer política oficial como Primer Ciudadano de la  República y presidir asambleas partidarias, tampoco sus funciones eran diferenciales entre asistir a eventos con sectores de la nación y conjugar llamados a favor del voto partidario, no existían distingos entre pronunciarse contra sus adversarios políticos, etc.  los miembros del gabinete de gobierno a su imagen y semejanza ejercían funciones similares,  privilegiando a los miembros de su partido y condenando a todo adversario de cualquier aspiración laboral;  el ejercicio de esta anormalidad permitió que muchos empleados gubernamentales bajo su calidad de miembros de un instituto político trabajaran a “discreción” durante años, si hacemos un breve repaso sobre dichos acontecimientos, nos alcanza para una enciclopedia, si dudan de ello podemos indicar las denuncias de algunos ministerios y las irregularidades encontradas.

     

    La unión Gobierno-Partido también afectó la promoción de profesionales en cargos de dirección institucional, la simple sospecha eliminó la posibilidad de ascenso y frenó la movilidad social de amplios sectores muy valiosos, la irradiación de esa visión deforme también fue una política comercial, bajo el otorgamiento de contratos a empresas “amigas” y excluyendo a los enemigos o sospechosos, así entre compadres y miembros los negocios son muy favorables, la saga de muchos retrasos o proyectos fallidos puede encontrarse en proyectos con “pérdidas inexplicables”.

     

    Existe un rosario de nombres de funcionarios de gobiernos pasados, los cuales fueron acusados de corrupción pero nunca fueron juzgados por ningún delito, el daño a instituciones aún es lamentado por los actuales funcionarios.

     

    En otros aspectos la unión de Partido-Gobierno fue de tal magnitud en el sistema financiero que algunas entidades terminaron en la quiebra, al igual que el enriquecimiento inexplicable de otras familias etc… todo fue perdonado por la calidad de miembro del partido bajo la complicidad del aparato del Estado, al final no existió separación alguna, la reincidencia y la corrupción fue tan visible, que después de décadas  la ciudadanía se cobró en las urnas electorales aquellas ofensas a la inteligencia de la ciudadanía.

     

    Ahora al menos la separación del Poder Ejecutivo y Partido Político tiene la virtud de diferenciar entre personas  y miembros del partido, de tal forma que se puede distinguir entre Política de la República y política partidaria, se puede distinguir entre proyecto de la nación y propuestas partidarias para un quinquenio, al igual que toda la transparencia en el ejercicio público para otorgar proyectos. Este logro es una verdadera diferencia con el pasado.

     

    www.cesarramirezcaralva.com